martes, 31 de mayo de 2016

VARIOS. "STILL IN A DREAM. 1988-1995 A story of Shoegaze" (2016)


Siempre me gustó el shoegazing. Todos esos grupos que iban a su bola urdiendo exquisitas composiciones que vagaban entre la distorsión y la lírica más intensa, con esos pelos al viento, y casi siempre de negro o multicolores. Quizás fuese Jesus and the Mary Chain quien puso la primera piedra al edificio de los que tocaban de espaldas al público, mirándose siempre los zapatos, ufanos en la introversión.

Un buen amigo que vive en la pérfida Albion me trajo hace unas semanas este pedazo de artefacto llamado "Still in a dream", en forma de libro, con 5 cds y un buen montón de temas y bandas (no se repite ni una) para traer a colación un fabuloso género que nos hacía ( nos hace ) soñar.

Una exquisita y cuidada edición, dando una pequeña explicación sobre cada banda y canción, poniéndonos los oídos llenos de feedback avasallador. 5 discos, hay queda eso. Vamos que tenemos una oportunidad formidable para volver sobre algunos grandes conocidos y toparnos con enormes sorpresas.

Alli están esos trasuntos de Cocteau Twins (que también aparecen, y para mi referencia primordial del shoegazing) que se llaman An April March, y esa descarga explosiva que nos regalan The Lilys.  Debemos al sello 4ad, Rought Trade o Mute (aquí hay muchas más labels) que hallan sido el hogar donde producían al por mayor estos caramelos dulcemente venenosos de los que es imposible no caer rendidos a la primera de cambio. 5 cds, ostias. 5 cds.

Ahora suenan otros desconocidos para el que escribe, Majesty Crush, brumosos, cargados de nubes donde poner empeño para coser sueños, o para llover al reves. Como ese pop a borbotones que producían The Hinnies, "Gong", otro pedazo de artefacto radioctivo para soportar las inclemencias de los malos tiempos.

Y como no, por aquí tambien suenan Ultra Viviv Scene, Slowdive,  Kitchens of Distinction o Pale Saints,santo y seña todos ellos de un movimiento que duro poco pero que a día de hoy aun sigue removiendo la escena independiente con grupos que se sienten deudores (A Place to Bury Strangers,Deerhunter, Alcest, etc.). 

¿Alguien se acuerda de Revolver y sus shoegazing colindante con el britpop? Pues si, aquí también tienen su hueco con "Heaven sent an angel". Los cinco discos son grandiosos momentos luminosos donde cerrar los ojos, viajar en el tiempo, meterte en una sideral nave con destinos a finales de los 80 y gozar de una serie de impetuosas bandas que se pusieron por bandera la transgresión emocional, los ardores traviesos y los toques a arrebato. Aquí hay pócimas de psicodelia como Sprindrift, bandas americanas como The Curtain Society que seguían con acierto el hilo de Ariadna, otras que parecian petrificarse en un folk  lisérgico como Smashing Orange, juntos a otros que ocuparon las alturas por su potencia y nuestro conocimiento de ellos: Ride, Lush, Cranes, Swervedriver o Catherine Wheel, por citar alguno de ellos.

También aparecen otros que podrian estar encuadrados en el post rock, como Bardo Pond o Flying Saucer Attack, pero para el caso, su estetica musical cuadraba a la perfección con esa idea de dejadez y de distorsión, de elevarse hacia los cielo o de perderse en galimatias.

Sí y también aparecen The Jesus and the Mary Chain (pero no My Bloody Valentine, misterio....) y unos inconmensurables Adorable cuyo "Against Perfection" rallé no se cuentas veces en una época donde las cassettes dinamitaban nuestros oídos programando horas de esparcimiento y alegría, sordera perpetua, apertura de cielos infinitos.

Asi que ando moviendo el pelo que no tengo como un joven rapaz mientras suena Bowery Electric, Luna o Medicine, ejerciendo de detonante para esta necesaria explosión de los buenos momentos. Oigo mientras acabo el articulo a Elizabeth Frazer y el dia se convierte de repente en noche......






No hay comentarios: